Menú Principal
7 de enero de 2022

Evitar el tabaco o dejar de fumar, disminuye el riesgo de padecer un cáncer de vejiga

En qué consiste el cáncer de vejiga, sus factores de riesgo, cómo prevenirlo, a quiénes afecta más y su tratamiento, fueron parte de los temas que nos explica el Dr. Gonzalo Pávez, médico oncólogo y radioterapeuta del Centro Oncológico del Norte.

Según el facultativo, dentro de los distintos tipos de cánceres, el de vejiga es el noveno más común en el mundo. En 2012 se estimaron 430.000 casos nuevos y 165.000 muertes en todo el orbe. Además, este tipo cáncer es hasta 4 veces más frecuente en hombres que en mujeres.

Agrega que esta realidad se replica en Chile, donde la incidencia estimada de cáncer de vejiga para 2003-2007 fue de 546 casos anuales, con una tasa bruta estimada de 3,4 casos nuevos por 100.000 habitantes para ambos sexos. Para los hombres, se estimó una tasa ajustada de 4,2 casos en 100.000 habitantes, mientras que para las mujeres esta misma tasa fue de 1,8.

A nivel de la Región de Antofagasta, para los hombres este cáncer se presenta con mayor frecuencia, con una incidencia estimada ajustada de 20,6 casos por cada 100.000 habitantes, lo que es tres veces mayor que la región que le sigue, Tarapacá, que presenta 6,4 casos; y casi nueve veces mayor que la región de O’Higgins, que presenta la menor incidencia estimada para el país (2,3 x 100.000 habitantes). En el caso de las mujeres, el panorama regional es similar, con la incidencia estimada más alta (11,3 x 100.000 habitantes).

FACTORES DE RIESGO

El más documentado a nivel mundial corresponde a la exposición al tabaco (50-60 % de casos en hombres de EEUU, 30% casos en mujeres, implica aumento de entre 2 a 10 veces sobre población general). Otro ámbito dice relación con la exposición laboral de ciertas ocupaciones desde los años 50`: industria de cueros, colorantes, cauchos, pintura (25% de casos de hombres, 11% de mujeres). En dichas ocupaciones hay exposiciones a benzidinas, bifenilos, dioxanos, cloruro de metileno. En otras como choferes de transporte público se sospecha un aumento de incidencia, dado por la exposición a hidrocarburos policíclicos aromáticos.

Un tercer ámbito dice relación con la cloración de las aguas bebestibles, que fue reconocido en los años 70` y que estaba vinculado a los compuestos halogenados y que se confirmó el año 92´.

Un cuarto ámbito tiene que ver con el consumo de arsénico inorgánico, ampliamente documentado en nuestra región desde los años 70´.

SÍNTOMAS Y DIAGNÓSTICO

Según explica en Dr. Pávez, “los pacientes habitualmente presentan hematuria (sangrado por orina), aunque también pueden presentar dolor para orinar o espasmos vesicales. En general se sospecha cuando este cuadro no calza con cólico por litiasis urinaria o con infección urinaria recurrente”.

Explica que ambas condiciones son los diagnósticos diferenciales principales. Además se preguntará por exposición laboral, por el hábito tabáquico (cuánto fuma), si ha estado en ciertos lugares tropicales y selváticos.

Inicialmente se solicita un UroTAC de entrada (escáner de vías urinarias) y si se avanza en la sospecha podrá pedir exámenes de sangre y cistoscopía (procedimiento con sedación para visualizar paredes de vejiga con cámara). De ser necesario se tomará una biopsia en ese mismo momento. Una vez se llega al diagnóstico con biopsia, se solicitan algunos otros exámenes: TAC de tórax, Resonancia Magnética o PET CT, según sea la apreciación médica en el caso de que exista una enfermedad invasora.

TRATAMIENTOS

El Dr. Gonzalo Pávez explica que la planificación y tipo de tratamientos para el cáncer de vejiga va a depender de la etapa en que encuentre éste. En una etapa temprana, se  realizan resecciones transuretrales (poda de tumor a través de cistoscopía).

En etapa 1, a las resecciones transuretrales, se suman quimioterapias seriadas aplicadas directamente al epitelio vesical (no en todo el cuerpo).

Si la enfermedad es detectada en una etapa 2 se ofrece quimioterapia seguida de cirugía (cistectomía radical o resección total de la vejiga). En ciertos casos se puede ofrecer cirugía que reseque solo una parte parcial de la vejiga, y en casos puntuales, se puede intentar preservar vejiga a través de radioterapia y quimioterapia.

En etapa 3, se aplica quimioterapia, previo a una cirugía. En casos de pacientes que no se pueden operar, se puede plantear también  radio y quimioterapia.

En caso de que este cáncer se etapifique en grado 4, se recurre a quimioterapia paliativa, radioterapia paliativa, en caso de sangrado o dolor y se dispone el ingreso del paciente a Unidad de Cuidados Paliativos y Alivio del Dolor.

PREVENCIÓN

Lo más relevante para evitar un aumento de riesgo de este tipo de tumores es la cesación tabáquica, ya que el riesgo disminuye en un 30% a los 4 años de haber dejado de fumar; y hasta 60%, luego de 25 años. Además, si uno ya tuvo un cáncer de vejiga, dejar de fumar reduce las recurrencias.

A lo anterior, se suma llevar una vida saludable y mantener una ingesta adecuada de líquidos.

Sin embargo, también es muy importante la detección precoz, para cual, en caso de sangrado es fundamental consultar a un especialista.

Según explica Dr. Pavez existen una serie de otros exámenes en investigación para poder detectar la enfermedad oportunamente, sin embargo, no existe ninguno consolidado ni aprobado unánimemente por la comunidad médica y científica.